Vecinos, organizaciones y especialistas buscan preservar un sitio histórico para que la población del partido de La Matanza y de Buenos Aires pueda estar en contacto con el andar que dejaron los querandíes

Un emprendimiento inmobiliario privado que se está construyendo en terrenos del Estado nacional y que no tendría habilitación municipal pone en riesgo la existencia de un importante yacimiento arqueológico querandí que es patrimonio histórico y cultural de todos los argentinos. Este lugar, ubicado en Ciudad Evita, sobre uno de los márgenes del río Matanza, que guarda los rastros de los primeros habitantes del territorio matancero, puede desaparecer si las autoridades gubernamentales no asumen el compromiso político necesario para preservarlo y detener el avance de quienes buscan usufructuar ese espacio para beneficio propio.

Los gobiernos nacionales, provinciales y municipales están en conocimiento de su existencia, pero, y a pesar de este reconocimiento oficial, el sitio sagrado Tres Ombúes no está protegido como corresponde y está en peligro de desaparecer. Para que esto no ocurra, distintas organizaciones (vecinales, ecológicas y aquellas que buscan conservar las culturas originarias), docentes, antropólogos, etc, están trabajando arduamente para evitar que esto suceda mediante una campaña de concientización y yendo a golpear las puertas de todos los organismos gubernamentales.

El Bonaerense se comunicó con Valentín Palma Callamullo, integrante del colectivo Tres Ombúes y miembro de la comunidad quechua, para conocer la tarea que están realizando para evitar que se pierda parte del patrimonio de los argentinos. “se está reclamando a las autoridades municipales, provinciales del área arqueológica, también pedimos informes a Vialidad Nacional o al área de tierras estatales para que se respete ese espacio. El enemigo no es una mega empresa de barrios privados sino que es una persona que quiere hacer su pequeño negociado”, denunció Palma Callamullo. “en los ‘90, el Centro de Registro de Protección Arqueológica de la provincia de Buenos Aires había presentado un proyecto para que sea declarado reserva arqueológica y natural para que la población matancera pueda estar en contacto con su historia real, con el andar que dejaron los querandíes.Estamos en 2016 y no hubo avances”, contó con resignación quien trabaja en favor de rescatar la memoria de los pueblo originarios.

El lugar que se pide que quede a resguardo figura como la parcela 948 en el plano catastral de la provincia. Esta zona, que está delimitada por Ruta 4 (Camino de Cintura), Autopista Ricchieri y el río Matanza, quedó excluido de la Reserva Natural de Ciudad Evita que fue creada en 2015 por el Honorable Concejo Deliberante de La Matanza pese a que en el proyecto inicial que presentó “Ciudad Evita x el Bosque” estos terrenos estaban incluidos.

Nadia Desimone, quien también participa del colectivo Tres Ombúes, explicó lo complejo de la situación. La parcela por la que se pide está en Ciudad Evita, partido de La Matanza, pero esos terrenos pertenecen al Estado nacional por este motivo desde el municipio nos dicen que no pueden hacer nada. Lo que pedimos es que la Agencia de Administración de los Bienes del Estado tome cartas en el asunto para cuidar el yacimiento”, indicó.

También contó que esta situación se originó hace mucho tiempo. “La familia Carballo tomó posesión de estas tierras hace 20 o 30 años y empezaron a construir. Ahora están levantando un barrio privado para la colectividad boliviana. Falta decisión política para proteger el sitio”, remarcó.

El temor que tienen quienes defienden los intereses colectivos es que se borre una huella del pasado. “Nos presentamos en la Secretaría de Cultura y Educación del municipio, también en la Secretaría de Gobierno y de Planeamiento Urbano, que es donde autorizan las obras, y les dijimos que frenen las máquinas porque además de destruir el yacimiento una vez que lo ocupen lo vamos a perder para siempre”, sostuvo.

Ceremonia religiosa

El pasado 20 de diciembre de 2015 integrantes de la organización Tres Ombúes, ecologistas y vecinos de Ciudad Evita pudieron ingresar por primera vez al lugar donde se encuentra el yacimiento arqueológico (tuvo que hacerlo acompañado por efectivos de la Policía Bonaerense para evitar que sean agredidos por los vecinos del lugar para llevar a cabo una ceremonia sagrada llamada Kapak Raymi. “Pudimos ingresar no por la calles del barrio sino que tuvimos que hacerlo por detrás del bosque, bordeando el río Matanza y tuvimos que hacerlo acompañados por una custodia policial y hablamos con los vecinos del lugar. Les explicamos que lo que queremos hacer es proteger el yacimiento arqueológico. Les explicamos que queríamos realizar una ceremonia religiosa y abrir un canal de diálogo”. explicó Nadia Desimone.

“El lugar está reconocido como tal por Arqueología de la provincia de Buenos Aires. Tiene un número de registro. No es que nosotros decimos que hay algo y nada más. En el Museo Histórico Municipal Brigadier Don Juan Manuel de Rosas hay vajillas que fueron recuperadas de ese yacimiento e, incluso, la propia Secretaría de Cultura y Educación en distintas oportunidades destacó el lugar como un sitio histórico”, remarcó Nadia, quien no pierda la esperanza de que el Estado asuma su responsabilidad y ejecute las medidas necesarias para proteger el sitio.

Por Walter Acosta
Fuente: http://www.elbonaerense.com.ar/
Fecha: 10/2/2016