Extracto de la Tesis sobre el curanderismo norperuano, dirigida por Carlos Martínez Sarasola y Alejandro Iglesias Rossi, escrita como Trabajo Final de la Maestría en Creación Musical, Nuevas Tecnologías y Artes Tradicionales de la Universidad Nacional de Tres de Febrero.

El Continente americano se encuentra habitado hace milenios por culturas tradicionales portadoras de un conocimiento ancestral resultado de sus relaciones con el mundo invisible.

Existen diferencias geográficas y culturales en cuanto a la terminología para definir a una persona que es heredera de las tradiciones autóctonas y especializada en conectar con los distintos planos de la realidad y formada en el arte de curar. En Perú el término Curandero es sinónimo del Chamán dividiéndose entre Curanderos (los que hacen el bien) y Ganaderos(los que practican el mal).

La costa norte peruana fue receptora de grandes maestros y maestras de estas tradiciones pertenecientes a los pueblos Mochicas y Chimúes. Ellos dejaron plasmada su sabiduría en vasos escultóricos, templos, pinturas y relieves. Grandes Chamanes o curanderos ejercen sus prácticas a través de sus Artes: varas, piedras, compuestos de hierbas, instrumentos musicales que conectan al mundo espiritual con el mundo terrenal siendo emisarios de ese conocimiento, otorgando potencias y ejerciendo influencias en las prácticas rituales que practican hace milenios y que hoy día continúan vigentes.

Todas las culturas nativas de nuestro Continente se basan en la premisa de que vivimos en un mundo de energía y sus creaciones rituales bucean en ese universo otorgando curaciones milagrosas, profecías, ensueños, etc.

Las estructuras rituales y artísticas creadas por los chamanes de América son capaces de trabajar dentro del campo energético de la persona afectándola ya sea para un equilibrio físico, psíquico y espiritual, o bien para su detrimento. Estas culturas desarrollaron durante milenios arquitecturas sagradas que producen hechos energéticos, calculando proporciones precisas para generar efectos concretos en este plano.

Mis Guías dentro de la Tradición Mochica son hijos e hijas del reconocido Eduardo Calderón Palomino, El Tuno, más conocido como “El Chamán de los 4 Vientos” por el reconocido libro del antropólogo californiano Douglas Sharon.

A continuación se detallan extractos de diferentes entrevistas:
“Me llamo Josefina Calderón Sánchez, soy peruana vivo en Trujillo y soy la hija del Tuno. Mi padre es Cajabambino, y mi madre es de Moche.

Un curandero es aquella persona que ayuda a la gente a salir de sus problemas, de la gente que les hace el daño por onda mental. Y unos de los instrumentos con los que ayuda es un cuy, con el que soba a sus pacientes, porque el cuy es una radiografía, en donde puedes diagnosticar las enfermedades. En este roedor se puede visualizar si estás bien del corazón si estás bien del páncreas, hígado, riñón y si tienes daño sale porque está el plexo solar donde el cuy absorbe esas energías y también puedes darte cuenta si tienen daño (acción energética negativa de enemigos).

En ciertos libros que se han escrito sobre mi padre, él menciona dos hijos específicos que llevan la Tradición, uno soy yo y otro es mi hermano. Yo nací con un Don porque nací con una marca. Me formé de muy niña porque mi padre me mandaba a los 10 años ya a curar para el Ojo, el Chukake, estiramiento de la panza, susto, los huesos y un poco más grande él nos mandaba a hacer muchas cosas y al ayudarlo aprendía. Muchos de mis hermanos continúan nuestra Tradición hasta el día de hoy.

Los curanderos tienen su zona especial, su laguna específica, los de magia blanca tienen la laguna Chimbe y los que tienen la magia negra tienen otra clase de lagunas, mi padre iba a la Chimbe, es la laguna de los curanderos del bien y los otros van a la laguna del Toro ahí van los que hacen el daño. A la laguna van a purificarse y les da energía, también hay cerros específicos. Él hacía las curaciones en las Huacas a campo abierto, en la del Sol y la Luna, para realizarlas pedía permiso a sus Colosos, a los Ancestros de las Huacas porque ahí se trabajó mucho con los mejores maestros, los chamanes antiguos. Hacía la espiral, que es una entrada y salida de la energía y el ritual del fuego donde pone leños y prende el fuego y ahí se van recitando cuentas alrededor de un círculo, el ritual de la muerte lo hacía en Cusco.

Los Mochicas no dejaron un escrito sobre cómo eran ellos, en la cerámica se encuentra todo lo que el curanderismo transmite. Guardaron sus conocimientos en la cerámica y en su Arte (frisos, esculturas, textiles). No hay nada escrito, en la cerámica se puede ver la Huachuma, el cuy, los chamanes, también se encuentra su conocimiento plasmado en los frisos de las huacas del dragón, de la esmeralda, del sol y la luna y Chan Chan, la ciudad de barro más grande de América”.

A continuación Josefina detalla ciertos tipos de enfermedades y curaciones espirituales:
“El SUSTO es supongamos los niños siempre tienen tendencia a correr y se pueden caer o el perro lo puede asustar, el niño pierde apetito se empieza a pellizcar la nariz. Para esto se realiza una curación con diferentes elementos (Hierbas, huevo, perfumes, Piedra de alumbre)”.

“El MAL DE OJO se lo producen a los niños cuando una mujer adulta está menstruando y se acerca o cuando un adulto mira a un niño con envidia o mala energía. Para aliviarlo se utiliza el algodón pardo se hace hilacha y se soba al niño, o la totora o el ají colorado cuando se quema se ve lo que tiene la criatura. Se hace también con el periódico, con el huevo, con el calzón y con la vela son cosas con las que uno va sobando y absorbe lo que tiene el niño.”

“El CHUKAKES es el mal de ojo pero en los adultos, es cuando alguien te avergüenza o te envía mala energía y empieza a doler la cabeza. Eso se cura con la quebradura, se hacen unos movimientos y se levanta a la persona por la espalda previo a cruzar sus brazos por los codos, se escucha que suena la espalda y libera esa energía, luego se le dan tisanas de manzanilla o cerraja si es más grave.” “La LIMPIA es una versión reducida de la MESA (ceremonia mayor), la persona ingresa en un círculo de Maíz blanco molido y se puede visualizar sus males o quién ha sido la persona que lo perjudica y revertir esa situación. Se utilizan instrumentos, cantos, perfumes, hierbas, varas, espadas, oraciones y plegarias, se convocan Santos, Cerros, Huacas, Lagunas, Maestros difuntos, entre otros.”

Según Víctor Manuel Calderón Sánchez (CHINO):
“La Mesa es todo una noche, tomar Huachuma, elevar la perla por las narices; Tabaco, Florida, Kananga y Yonque, Cañazo, azúcar, Lima, es una combinación para abrir el 3er ojo, ahí tienes el sentido el olfato y sientes o escuchas si viene alguien, todo está combinado ahí eso te abre, te puedes transportar a otro sitio también, son cosas maravillosas, o te puedes comunicar con los seres que has perdido, con tus muertos, maestros antiguos, tú te ves acorralado y tu tomas una visión a ellos, tu mente lo está llamando dices “Maestro Ayúdeme” y tú sientes que SHU! Llegan y te hablan en el oído te dicen lo que vas a hacer lo escuchas clarito y TAK! Te salen las cosas más rápido, cuando tengo problemas trabajando no entiendo, lo llamo a mi papá y él me va soplando como si fuera un examen, haz así, haz así.

Yo puedo mirar entre el águila, es el poder de la persona, el animal que vuela y está observando. La señorita es para el campo de amor, la serpiente es campo cuando estas enredado, el colibrí es para tristezas y angustias, y el cactus es para limpiar todo lo que son negocios, trabajos, y este es para justificar, luchar para dar fuerza a la persona, la maraca nada más es para despertar a la persona, los silbidos te entran al cuerpo ssssssss y de ahí te sacan chchchchc te hacen vibrar pues, por eso hay dos clases de sonido el primero y el segundo.

El sonido de la botella se usa también pidiéndole a los cuatro lados que todo se conjunte, que se metan al centro, hacen la antena, se va la energía negativa y le entra la energía positiva como decir se encajan. ¡CHU!. El seguro son las hierbas como si fuera una batería, son 160 hierbas que hay dentro, es una combinación como si fuera un cable, te da la energía, te da fuerza, ese es el corazón de todas las cosas, esa es la pantalla, el televisor de todo, tu miras ahí y las plantas te indican, es como si fueran conexiones, son antenas.
La mesa es cuadrada tiene las varas, los santos, piedras y el seguro en medio, el agua al costado San Pedro también entra ahí, los 4 campos negativos, tiene que haber el bien y el mal porque si haces solo el bien, te aplastan, tiene que estar el bien y el mal entonces hay conexión, la balanza, el equilibro que le llamamos. La Lima es para abrir el campo magnético, el perfume es para aromar y la florida es para justificar toda clase de problemas, te limpia y la Kananga es para botar, para rechazar todo lo que es malo.”

Por Mg. Andrés Eduardo Fortunato*
Fecha: 30/11/2018

*Profesor de la Licenciatura en Música Autóctona, Clásica y Popular de América de la Universidad Nacional de Tres de Febrero. Desde mediados de la década pasada es investigador, luthier de Instrumentos Precolombinos, compositor y solista de la Orquesta de Instrumentos Autóctonos y Nuevas Tecnologías.